Mañana será distinto,
cambiará el color del cielo,
se borrarán de improviso
los adioses, los silencios;
mañana, los tonos grises
se volverán tornasoles
y ya no serán tan tristes
los silencios, los adioses.
Mañana, la Primavera
estallará en el Invierno,
se acabarán las esperas,
los adioses, los silencios;
renacerán otros sueños,
resurgirán otras flores,
ya no serán tan eternos
los silencios, los adioses.
Se apagarán soledades,
se encenderán los deseos,
no engendrarán ansiedades
los adioses, los silencios;
verá un corazón dormido
despertar sus ambiciones
y relegar al olvido
los silencios, los adioses.
Mañana será distinto,
volveremos a encontrarnos,
habrá de nuevo un camino
por tus besos, por tus brazos;
por nuevamente querernos
se irán a otros horizontes
los adioses, los silencios,
los silencios, los adioses.
POR TU CUERPO
Por una sonrisa tuya
que me llegase hasta dentro,
daría el Sol y la Luna
y las estrellas, si puedo,
mi madrugada más tibia,
mi más oculto deseo...
si eso diera por tu risa
¡qué daría por tu cuerpo!
Por una sola mirada
de esos ojos libres, tiernos,
daría un trozo de mi alma
y el corazón por entero,
el amanecer y el alba
y todo mi sentimiento...
si eso doy por tu mirada
¡qué daría por tu cuerpo!
Por un abrazo a escondidas
de rumores y secretos,
daría mi media vida,
la otra media por un beso;
por encerrarme en tus brazos,
por naufragar en tus senos,
si por eso doy la vida
¡qué daría por tu cuerpo!
Por tu cuerpo, cruz y raya
de todos mis argumentos,
por tu cuerpo, blanca playa
a donde escapan mis versos,
por tu cuerpo, enredadera
donde se esconden mis sueños,
por tu cuerpo, Primavera
de mi vida, por tu cuerpo.
SOY EL MEJOR
Para subirte a la Luna
y resbalar por tu blusa,
soy el mejor,
para interrumpir tu prisa
y robarte una sonrisa,
soy el mejor,
para hacer que sea Verano
en Invierno, todo el año,
soy el mejor,
para llenar de violines
los parques y los jardines,
soy el mejor.
Soy el mejor
porque te llevo en el alma
a fuego lento grabada
en el alma y en la voz,
soy el mejor
porque navego a tu aire
como nunca lo hará nadie,
como nadie navegó.
Para besarte en los labios
con besos antiguos, largos,
soy el mejor,
para estrecharte en mi pecho
como nadie antes lo ha hecho,
soy el mejor,
para desnudar tu cuerpo
con el más fuerte deseo,
soy el mejor,
para que grites y me ames
con el ardor más salvaje,
soy el mejor.
Soy el mejor
porque anidaste en mi mundo
y me cambiastes el rumbo
y me hiciste un soñador,
soy el mejor
porque te quiero a escondidas
y para toda la vida,
con todo mi corazón.
QUIEN MAS TE QUISO
Mientras haya una mirada
como la tuya, encantada,
atardecer de recuerdos,
amanecer de esperanzas,
mientras haya una mirada
iluminando el camino,
yo andaré cerca de tu alma,
yo que fui quien más te quiso.
Mientras existan tus manos
las mías acariciando,
traspasándome el calor
o el frío que estés pasando,
mientras existan tus manos
moldeando mi destino,
yo estaré cerca de ti,
yo que fui quien más te quiso.
Mientras existan tus labios
besando con besos largos,
besos de mujer y niña,
besos de Otoño y Verano,
mientras existan tus labios
y sus besos dulces, limpios,
yo te estaré recordando,
yo que fui quien más te quiso.
Mientras exista un "te quiero"
que te salga muy adentro,
que nazca en el corazón
y se derrame en el pecho,
mientras exista un "te quiero"
audaz, intenso, preciso,
yo andaré por tu sendero,
yo que fui quien más te quiso.
AQUEL BESO EN LA CALLE
Aquel beso en la calle
apasionado, suave,
fugaz, intenso, loco,
me desarmó del todo,
volví en aquel momento
a vivir en el tiempo
en que me alimentaba
solamente de sueños.
Tu cuerpo entre mis brazos
fue arte y filigrana,
tañido de campana
la frase de tus labios,
lenta lluvia de Otoño
tu beso aquella tarde,
apasionado, loco,
aquel beso en la calle.
Se borró de repente
el ruido, las miradas,
me pareció que estaba
contigo solamente,
de pronto se paró
el tiempo en el reloj...
te besé con más ansias
que nadie te besó.
Aquel beso en la calle
me supo a mar y a tierra,
a montañas y valles,
a flores y veredas,
a caminos ocultos
por imposibles lagos
donde perdí mi rumbo
y naufragué en tus labios.
En tus labios de menta,
de miel y de manzana,
en tu boca de fresa,
tu boca de esperanza,
tu boca, primavera
de aquel beso en la tarde,
tu boca, carcelera
de aquel beso en la calle.
COMO TU ME HICISTE
Me quitaste de repente
el agua donde bebía,
el mar donde suavemente
mi barco se estremecía;
acostumbrado a tu pelo,
a navegar tu sonrisa,
me vi de pronto sin cielo,
sin el cielo de tu vida...
ahora dices que soy triste:
yo soy como tú me hiciste.
Acostumbrado a tu alma,
a moverme por tus sueños,
mi vela quedó apagada
en mitad de aquel Invierno;
fui viajero del silencio,
me vestí con la distancia,
anochecí con el hielo
y amanecí sin el alba...
ahora dices que soy triste:
yo soy como tú me hiciste.
Ahora que de nuevo vuelves
a transitar mi camino,
el gris ya me pertenece,
todo se ha vuelto distinto;
qué daño me hiciste el día
que abandonaste mi huella,
que borraste mi sonrisa
y anocheciste mi pena...
ahora dices que soy triste...
¡yo soy como tú me hiciste!
SUCEDE
Sucede que estalló la Primavera
en un rincón brillante de tus ojos,
con un ceremonial de madreselvas
subiendo los motivos de tu rostro,
y la mano que ayer era de hielo
se hizo mano febril, mano de fuego.
Sucede que doblaron las campanas
cuando nuestras miradas se cruzaron,
se abrieron las ventanas de tu alma
y se llenó de luz nuestro pasado,
el mundo entero se quedó pequeño
incapaz de albergar a nuestros sueños.
A pesar de que el negro no me gusta,
tu imagen fue de pura filigrana,
la belleza y la paz se hicieron tuyas,
derrochaban ternura tus palabras,
y aquel beso fugaz, de niña estrecha,
me llegó al corazón como una flecha.
Sucede que hay mil cosas increíbles
como este amor por ti, amor eterno,
sucede que hay amores imposibles
y por ello, quizás, venzan al tiempo,
sucede que Septiembre se hizo Enero,
sucede simplemente que te quiero.
ESTE VIEJO AMOR
Quizás alguna tarde, cuando el tiempo
pinte una cana más en tu cabello,
lo veas pasar;
temeroso de todo, como huído,
sin saber dónde ir ni en qué sentido
ni a qué lugar.
Quizás alguna tarde, cuando el aire
pase através de ti y no haya nadie,
lo veas venir
como un pajarillo abandonado
lo verás regresando del pasado
yendo hacia ti.
Este viejo amor mío descarriado,
descendiente lejano del pasado
siempre fue así:
perseguidor de sueños imposibles,
ladrón de lo más inaccesible,
un infeliz.
No lo dejes pasar sin contemplarlo,
no lo dejes marchar sin avisarlo
que aún estás
en la puerta entreabierta de los sueños
que se fueron haciendo más pequeños,
cada vez más.
No dejes que prosiga su camino,
perdedor como siempre, peregrino
de una ilusión
que a fuerza de tropiezos y reveses,
le falló la esperanza muchas veces
y la emoción.
Atrápalo un minuto en su escapada,
recógelo un momento en tu mirada,
hazle sonreir
con una tierna caricia de tus manos,
y con un "no te olvido, aún te amo",
deja a este viejo amor que vuelva a huir.
UNA MANO DE HIELO
Se me rompió el alma
de pronto en mil pedazos,
se me borró el espacio
de aquella habitación...
yo vi un trozo de cielo
y a la vez, como un rayo,
una mano de hielo
me apretó el corazón.
Llevabas en el pelo
tan rubio, el Sol brillando,
tus ojos eran lagos,
tu boca, tentación;
no supe dónde estaba,
sólo supe que había
una mano muy fría
que apretó el corazón.
Hablabas, contestaba,
no sé qué me decías,
allí estaba mi vida
y enfrente estaba yo;
qué distinto pensarte,
soñarte, a verte viva,
el pasado, de un golpe,
en el alma estalló.
Y para que no vieras
en un hombre, una lágrima,
salí de aquella estancia
sin siquiera un adiós;
en la calle, la gente
no supo que, en silencio,
una mano de hielo
me partió el corazón.
PRONTO Y TARDE
Abriste una ventana,
cruzaste los umbrales,
llegaste pronto y tarde...
y ya no te esperaba,
ya no era como antes,
había poco camino
por delante.
Llamaste a un sentimiento,
el amor me pintaste
y fuiste todo y nadie...
fugaz, intenso, incierto,
el amor me llevaste
con tu voz de silencio
por el aire.
En tus ojos volcaba
pequeñas soledades,
llegaste pronto y tarde...
pensé que no pensaba,
te vi pequeña y grande
cuando en ti me borraba
al abrazarte.
Y sin mirar atrás,
y sin mirar delante,
soñaba con mirarte...
te quise una vez más,
te quise sin pensarte,
sabiendo que era pronto
y era tarde.
DE TODAS LAS MANERAS
Yo quiero estar presente
en ti, continuamente,
ser parte de tu vida,
tu gran amor ausente,
yo quiero tener hueco
en un rincón de tu alma,
arder contigo, llama
de algún arbusto seco.
Te quiero como quieras,
de todas las maneras,
de todos los estilos,
de todas las fronteras,
si quieres, como amante,
si quieres, como amigo,
un discreto testigo
siguiendo tu viaje.
Si quieres, animoso,
si quieres, perezoso,
corriendo tras tu huella
o escondido del todo,
si quieres, en silencio,
si no, a puro grito,
yo sólo necesito
sentirte piel adentro.
Te quiero como quieras,
de todas las maneras,
si quieres, en Otoño,
si no, en Primavera,
con estas ansias mías
vestidas de nostalgia,
de tiempo y de distancia,
de madrugadas frías.
Si quieres, con sonrisas,
con vientos o con brisas,
si no. con una lágrima
apenas contenida,
siempre con la esperanza
y la melancolía
de no sentirte mía
llevándote en el alma.
Te quiero como quieras,
de todas las maneras,
si quieres, desde lejos,
si quieres, desde cerca,
con los brazos abiertos,
con los ojos cerrados,
con el alma en las manos...
o tan sólo con sueños.
NO TARDES
Quién rompe el silencio
buscando mi aliento,
que ya es algo débil,
que ya es algo incierto;
si vas tras mi huella,
no tardes, amiga,
que estoy al acecho,
sin una guarida
y en busca de tiempo.
Quién trepa la sombra
y acaso me nombra
con una voz dulce,
con una voz sola...
si vas tras mis pasos,
levántate y vente,
que me queda un salto,
uno solamente
y aún puedo dártelo.
Quién para y me mira
sin una mentira
bailando en el rostro,
riendo escondida;
si tú te has fijado
que estoy, que respiro,
no llames, penetra,
que estoy esperando
detrás de la puerta.
Aquí, cerca y lejos,
escéptico, tierno,
ganador por fuera,
perdedor por dentro,
aquí, medio ciego
de tedio y costumbre,
aquí aún te espero...
no tardes, te ruego,
no tardes, acude.
VOY A MATAR TUS RECUERDOS
Voy a matar mañana tus recuerdos
que aún respiran
en un rincón oscuro del Invierno,
entre mi vida,
voy a borrar de un trazo tu sonrisa
que me acompaña
entre los recovecos de mi prisa
y de mi alma.
Voy a matar mañana tu mirada
porque tus ojos
se siguen reflejando en la ventana
de mis insomnios,
voy a buscar desesperadamente
otra mirada
que destierre la tuya para siempre
de mi morada.
Voy a matar mañana este deseo
que aún perdura
y que busca tus labios y tu cuerpo
y hacerte suya,
voy a rondar al fin por otra cama,
en otros brazos,
y no tener así tan rota el alma
en mil pedazos.
Voy a matar mañana tus recuerdos,
voy a matarlos
porque ya no resisto más inviernos
grises y largos;
voy a matarlos, sí, pero mañana,
porque hoy no puedo,
porque hoy aún mantengo la esperanza,
porque hoy...te quiero.
QUISIERA
Quisiera ser azul, como ese cielo
que pones en tus ojos, si me miras,
quisiera ser el aire que respiras
y el oro que se escapa de tu pelo.
Y el motivo real en que te inspiras,
y las alas ardientes de tu vuelo
cuando sueñas amor y desde el suelo
te elevas a las nubes y suspiras.
Quisiera ser la luz de tu alegría
y que mis versos fueran como lazos
que uniesen nuestras vidas día a día;
quisiera que saltase en mil pedazos
mi ayer lejos de ti, que fueses mía
y hundirte para siempre entre mis brazos.
TE MANDARE
Te mandaré en silencio mi alegría
para que dé a tu vida un homenaje,
para que te la pongas cada día
como el abrigo pones sobre el traje.
Te mandaré las flores más hermosas
y yo me quedaré con las espinas,
porque llenar quisiera yo de rosas
este sendero por el que caminas.
Te llegarán volando mis canciones
y harán a la distancia más pequeña,
revivirán antiguas emociones
que harán arder de nuevo nuestra leña.
Te mandaré otra vez aquel poema
que fue de todos ellos el primero
conque quise expresar, por solo tema,
lo mucho que te quise y que te quiero.
Te mandaré tan sólo de mi vida
todo lo bueno que aún conservo en ella,
esa esperanza que no está perdida
y que es mi cielo azul y mis estrellas.
Te llegará el amor que tú me inspiras
volando por el aire hasta tu frente,
se meterá en tus ojos, si me miras,
y allí se quedará eternamente.
EL AMOR ES PERENNE
El amor es perenne
como la hierba,
como el río que crece,
muere y se crea,
y se está yendo siempre
y siempre queda.
Y resurge unas veces
con nueva fuerza
y después languidece
como si fuera
a escapar y a perderse
por otra senda.
Pero vuelve y se crece
y se conserva,
el amor no se muere
porque, recuerda,
que el amor es perenne
como la hierba.
Como la hierba verde
que aunque parezca
que es la misma de siempre,
siempre se crea,
cada tallo que muere
otro releva.
Como el viento que a veces
trae y se lleva,
que se está yendo siempre
y siempre queda,
de la misma manera
que va y que viene,
el amor es perenne
como la hierba.
© 1982 Javier de Lucas
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